A veces se nos dan las oportunidades de revivir momentos cinematográficos únicos que nos han marcado de una forma u otra. Super 8 es sin duda una de esas oportunidades y creo que le debemos y mucho a los grandes Abrahams y Spielberg, mientras uno ha querido homenajear el inmenso trabajo que ha hecho Steve en esto del cine el otro se lo ha puesto todo en bandeja para poder hacerlo a su manera.
Tras una campaña viral increíble llega por fin a nuestras pantallas Super 8 y todo hay que decirlo se esperaba un poquito más sobretodo por las ganas que le teníamos a esta producción estilo E.T. pero de ahora. Aun así creo que las expectativas nos las hemos creado nosotros solitos y si la analizamos fríamente estamos ante un film más que notable que principalmente nos hace volver (a algunos más que a otros) a algún momento de la infancia en la que veíamos esas películas de los 80 y nos quedábamos fascinados.
No he dejado de pensar en los Goonies, E.T. , Encuentros en la Tercera fase…y he de decir que el recordar una tras otras todas estas joyas ha hecho que pasase un muy buen rato en la butaca. Sumémosle a esto una historia sólida (salvo algún que otro giro algo incoherente o relaciones entre personajes que no pintan mucho) unos efectos especiales logrados, una recreación casi perfecta de la época y sobretodo un reparto (la gran parte niños) que están espléndidos. Este ha sido el gran acierto del Film, un gran casting desemboca en esto, un reparto infantil que cumple a las mil maravillas y que te hace reír o emocionarte cuando toca.
Para muchos puede que la película se haya quedado en un mero pasatiempo y homenaje a Spielberg, para mí se ha logrado eso y mucho más, pero sobretodo me quedo con lo evoca esta película mientras te está narrando una historia más que interesante.